Primer día de monte tras las vacaciones. El día ha amanecido nublado, pero no hay que perder las buenas costumbres. He salido de Alonsotegi a las 7:45 y he subido por el barrio de Azordoiaga hacia la zona minera de Mintetxu. He subido la pista de cemento que lleva hasta el agroturismo Ordaola, ahora también asador Los Sarmientos.
En Ordaola finaliza la pista cementada y el camino, ahora de tierra, continua ascendiendo entre pinos.
Hasta que la pista se aplana y llega al cruce que asciende hacia el Pagasarri. Eran las 8:50 h. cuando he llegado a este punto. Desde aquí se continua subiendo hasta otro cruce, que en su ramal izquierdo lleva al Paga y a las neveras de Tarín, y hacia la derecha se encamina hacia el Ganekogorta. Este es el que yo he cogido.
He subido por el camino al Ganeko -por el sendero, no por la pista que queda a su derecha- hasta un primer llano, donde he abandonado la transitada senda para ascender por la izquierda hacia el Biderdi. Todo esto, entre una espesa niebla.
A la derecha, la senda de ascenso al Ganekogorta. La subida al Biderdi se coge por la izquierda.
La mejor referencia es dirigirse hacia una torre de alta tensión. Pero hoy se escondía, fantasmal, y mucho antes de verla se escuchaba el chisporroteo de los cables húmedos por la niebla.
Un senderito se abre entre la hierba y el brezo, señalado por unos troncos alambrados que protegen plantones de árbol.
Llegada a la cresta que lleva al Biderdi y, si continuamos por ella, al Ganekogorta.
Cumbre del Biderdi (877 m.). Eran las 9:30 h.
He descendido por el mismo camino.
Pero al llegar a la pista que lleva hasta el Pagasarri me he desviado por el discreto sendero que lleva hasta el Ganekondo.
Cumbre del Ganekondo (627 m. / 10:00 h.).
Y desde aquí, por el mismo sendero apartado de la pista, hacia el Lapurtzulogana.
Lapustzulogana (677 m. / 10:15 h.).
Desde aquí, siguiendo por el mismo sendero, se llega en pocos minutos hasta el Pagasarri.
Pagasarri y Ganekogorta han sido siempre dos montes muy caminados y muy queridos para mucha gente. De ahí que sean lugares para el recuerdo.
Desde el Paga he bajado por las neveras hasta el mismo cruce en el que, unas horas antes, he cogido hacia el Ganeko. Desde aquí, por el mismo camino de subida (Ordaola, Mintetxu y Azordoiaga) he regresado a casa.
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