Puertas insospechadas, topografías liminales, umbrales que dan paso a lugares inesperados.
Como el espejo de Alicia.
Hay que atravesarlos y dejarse sorprender...
Uno se apoya en la mochila. Porque en el momento en que nos quitamos el peso de nuestros hombros no sabemos enderezarnos enseguida; ¡pues resulta que era el peso lo que antes nos daba seguridad y equilibrio! [George Simmel]