Hueso de aceituna
Traducción de Jorge Sans Vila
Sígueme, 2021
"Dios enseña que la especie humana es fuerte cuanto más diversa y cuanto más se arriesga. Es, por tanto, una equivocación cualquier intento de darle una sola sangre, un solo pan, una sola medicina.Y hasta un solo Dios, porque a Él seguro que le encanta la infinta variedad de voces con que las criaturas, incluidas las bestias, piden que esté cerca".
Erri de Luca es un habitual de este blog. Ya he contado en otras ocasiones cómo llegó a mí y todo lo que comparto con un autor con el que me siento muy identificado.
En este libro retoma la tarea de espigador de las escrituras judeo-cristianas que ya ejerció en Hora prima, rebuscando migajas de sabiduría en unos textos tan vendimiados a lo largo de los siglos que parece imposible sacar de los mismos ningún fruto nuevo; pero Erri de Luca lo consigue.
Su lectura de los textos del Antiguo y el Nuevo Testamento es la de un no creyente que, tal vez por eso, los recibe sin prejuicios, interrogándolos con libertad y dejándose decir con gratuidad y gratitud. El resultado es una personalisima reflexión que invita a meditar sobre el carácter mestizo de Jesús ("Entre sus antepasados femeninos había una cananea, Tamar, y una moabita, Rut, porque el Mesías es un mestizo, no un purasangre") gracias a haber sido "injertado en madres que son ante todo mujeres de gran caracter"; sobre la eficacia de la bendición y la "sabiduría sonriente"; sobre la diferencia entre "la vía corta de las armas" representada por Barrabás y la propuesta de redención radical de Jesús...
Esperando con ansia la publicación de su último libro, A tamaño natural, que ya estoy leyendo en italiano y, por ello, perdiéndome muchos de sus matices.