El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, en el ejercicio de su cargo, tuvo ayer una intensa actividad adjetivadora.
Por un lado, adjetivó de "radicales" las movilizaciones y actos de apoyo al juez Baltasar Garzón desarrolladas en días pasados. "El artículo 1 de la Constitución dice que España es una monarquía parlamentaria. En la manifestación se vieron banderas republicanas. ¿No es radical el que pide un cambio del modelo de Estado?", declaró el portavoz del PP.
Por otro lado, González Pons adjetivó de "extremadamente desafortunadas" las palabras del concejal del PP en Badalona, Xavier García Albiol, por las que justificaba la inclusión de una foto con una pancarta con la frase "No queremos rumanos" en los dípticos repartidos por el edil popular/populista y por la presidenta del PP en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho.
"Radicales"... "Extremadamente desafortunadas"... ¿Cuál es el adjetivo más fuerte? ¿Ya nos lo explicaría González Pons?
Hasta entonces, acérrimo constitucionalista español como es, sospecho que con el primer adjetivo hace referencia a un pecado político mortal -"¿No es radical pedir un cambio del modelo de Estado?", ¡por Dios!- mientras que con el segundo, a pesar de su mayor dimensión aparente, no pretende otra cosa que apartar a un lado un pecado político en todo caso venial.
Como es sabido, nuestra Constitución no dice nada sobre querer o no querer a los rumanos. Para saber algo al respecto habría que leerse la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Tal vez otro día.
Parece que la inmigración va a convertirse en un arma electoral a pesar de todas las declaraciones de principios: el hiyab, el empadronamiento... Y si de paso puede hacerse mayor la brecha entre Iglesia y sociedad civil, todo se aprovecha. Creo que una de las tareas que tenemos por delante es "coser" entidades, sensibilidades, políticas, personas,de modo que seamos capaces de poner el bien común,o los derechos humanos por encima de partidismos. Y de vivir más aquello que nos uno que lo que nos separa. Pero hoy no se estila...
ResponderEliminarAmigo Josep, amiga Mercè: no se estila, es cierto, buscar lo que nos une a todas y a todos. Querernos iguales pero diferentes, diferentes pero iguales. Y desgraciadamente la política no está mostrándose a la altura de las circunstancias.
ResponderEliminarBueno,me parece que voy por buen camino,esto de dejar de votar me parece que es una de las mejores cosas que he echo de unos añitos para aqui.
ResponderEliminarEsto es la guerra en politica todo vale,todo,no solo es la inmigracion es "todo" repito,los partidos politicos solo miran como ganar los mas posibles de votos aun dejando los idealismos,la etica y la moral de lado,lo que unos dicen si los otros no y viceversa,aunque sus electores salgan perdiendo y si no como ejemplo la gerra que esta dando el agua en Castilla la Mancha,pierdo aqui pero gano en Valencia y Murcia.En cuanto a lo del video me quedo sin palabras.